Ir al contenido principal

Lo público y la publicidad


“Hay gente que te molesta a diario. Irrumpen en tu vida, te agreden gratuitamente y desaparecen. Se asoman desde lo alto de los edificios y te hacen sentir insignificante. Hacen comentarios desagradables desde los laterales de los autobuses dando a entender que no eres lo suficientemente sexy o que la diversión está siempre en otro sitio. Salen en la televisión y hacen que tu novia se sienta incómoda con su cuerpo. Tienen acceso a la más sofisticada tecnología que jamás se haya inventado y la utilizan para abusar. Son los “publicistas” y se están burlando de ti.
En cambio tú tienes prohibido tocarles. Las leyes sobre marcas, propiedad intelectual y derechos de autor dicen que los publicistas pueden decir lo que quieran donde quieran con total impunidad.
¡A la mierda! Cualquier anuncio en un espacio público que no te deja elegir si verlo o no te pertenece. Es tuyo. Tienes derecho a cogerlo, transformarlo, y reutilizarlo. Puedes hacer lo que quieras con él. Pedir permiso para hacerlo sería como pedir permiso para quedarte con una piedra que te acaban de tirar en la cabeza.
No le debes nada a las empresas. Menos que nada; y sobre todo, no les debes ninguna gentileza. Ellos te la deben. Han reorganizado el mundo para ponerse delante de tus narices. Nunca han pedido permiso; entonces tampoco se los pidas a ellos”.
Bansky



Comentarios

Entradas populares de este blog

katysancheski

Comida a domicilio

Piropos salvajes

FUENTE: sanvalentin.org/ LomoNegro: No creo que estos piropos sean muy recomendables para conquistar a la amada (por mucho humor que contenga...) Los piropos de torrente Si vistes la película sabrás que sus métodos no son la manera más recomendable para ligar pero podrás reirte recordando las mejores frases del mítico persona cinematográfico torrente. Tus ojos son como dos sartenes, cuando los veo se me fríen los huevos. Eres más enrollada que las pelotillas de mis pinreles. Estás tan buena que te comía con ropa y todo aunque pasara un mes cagando trapos. ¿Buscas el tocador? pues ese soy yo. No te lo vas a creer, pero hace treinta segundos yo era maricón. Te voy a meter más rabo que cuello tiene un pavo. Miedo te tenía que dá si supieras donde me cuelgo la toalla mojá y el albornoz cada vez que pienso en tu cuerpo. Te voy a comer tol abujero negro sideral. Cada vez que te veo se me pone...